Este juego de palabras consiste en atribuir un autor «evidente», a refranes, proverbios, sentencias, citas o frases cotidianas. Es decir, nombrar a la persona, animal o cosa que podría ser la autora de esa frase.
Por ejemplo la frase: «Eres la única mujer de mi vida» es «evidente» que podría haberla pronunciado Adán.
(Basado en una idea propuesta por Esteban Grinbank a la lista de correo Snark en enero de 2003)
Eres la única mujer de mi vida (Adán)
Con ropa gano mucho (Amancio Ortega)
X (Un analfabeto)
Mi vida está llena de aspiraciones (Un asmático)
Todos me tratan a patadas (Un balón de fútbol)
¡Se me estropeó el despertador! (La bella durmiente)
¡Ahora vuelvo! (Un boomerang)
Es mejor dar que recibir (Un boxeador)
¡No al paro! (Un cardiópata)
Los libros de medicina no deberían tener apéndice (Un cirujano)
Vayamos al grano (Un dermatólogo)
Tengo todos mis hijos de apellido distinto (Juan Distinto)
Mi esposa tiene un gran físico (Albert Einstein)
No por mucho madrugar amanece más temprano (Un esquimal)
Estoy hecho pedazos (Frankestein)
Si hay algo que me revienta son los alfileres (Un globo)
La impotencia me la trae floja (Un impotente)
Vayamos por partes (Jack el Destripador)
Nunca seré el primero (Juan Pablo II)
Nunca pude estudiar Derecho (El jorobado de Notre Dame)
Me mato trabajando (Un kamikaze)
Me encanta firmar autógrafos en pelotas (Diego Armando Maradona)
El dinero no es lo más importante (Un millonario)
Los universitarios no tienen buenas facultades (El Ministro de Educación)
Nadie es perfecto (Nadie)
Estoy rodeado de animales (Noé)
Devuélvanme mi capa (El ozono)
Mi vida está en constante movimiento (Un enfermo de Parkinson)
Se me pasa el tiempo volando (Un piloto)
Los Reyes son mis padres (El Príncipe Felipe)
Nosotras apoyamos la liberación femenina (Prisioneras de una cárcel de mujeres)
No desearás a la mujer de tu prójimo (Tu prójimo)
A mí lo que me revientan son los camiones (Una rana)
Cada día me gusta más la humanidad (Un caníbal)
El coche nunca reemplazará al caballo (Una yegua)