(Las frases autorreferentes anteriores, están aquí)
10.200 | Aquí yo sigo en la brega, me quedé sin un dipolo, se retiró el «Nono Lolo» ausente de la refriega. Yo me di con toda entrega a esta lid igualitaria y contra la gripe aviaria yo combato y aquí lucho. Diez mil doscientas no es mucho, cuento solo como un paria. |
Roberto (Las Palmas de Gran Canaria, España) 2006 |
10.400 | Ahora vamos de deportes: ante la ausencia del «Lolo» me quedé jugando solo, no digo que no me importe, mas perdería mi Norte y en lugar de un buen pin-pon es un suplicio el frontón que me aturde y que me lía ¿habrá cosa más impía? Diez mil cuatrocientas son. |
|
10.600 | Quien quiera participar por aquí metiendo baza, si no es veloz y se atrasa no tiene más que esperar o buscar solo un lugar en esta sana porfía, no es el último quien ría mejor, por purgar la afrenta. Estas son diez mil seiscientas que lleva la suma mía. |
|
10.802 | Mientras, así continúo en esta suerte de envite, a ver si alguien sale al quite y que esto parezca un dúo. Lo digo, no lo insinúo porque llegado el momento me encontrará siempre atento. Diez con ocho, cero y dos ¡ejém! que me da la tos. Esto sí que va en aumento. |
|
11.000 | ¿Resultaré un egoísta si al dirimir cualquier lance intento que el mismo alcance un alto punto de vista? No quiero ser narcisista hablando siempre de mí, este género es así: sin esconder el orgullo cada cual cuenta lo suyo, y once mil letras aquí. |
Roberto (Las Palmas de Gran Canaria, España) 2006 |
11.212 | ¿Quién pretende abandonar esto en lo que estoy inmerso? ¿Qué va a ser del universo si aparcamos el payar? No queda más que aguantar, persisto en esto errabundo, no es por resultar facundo mas sí por llenar de goce, once mil doscientas doce y ya hemos salvado el mundo. |
|
11.420 | ¡Qué fácil solucionamos los conflictos mundanales! ¡Ojalá fueran reales sin precisar de reclamos! ¿Y si todos lo arreglamos eliminando injusticias? ¿Podrá haber mejor noticia? Tanto como que se cuente: once mil, cuatro con veinte. No lo tachen de estulticia. |
|
11.640 | No pretendía este combate a ninguno dejar fuera, intervenga aquí quien quiera aunque parezca un dislate, pues lo que aquí se debate tiene propio responsable, que con paciencia impecable once millares ya cuenta y otras seiscientas cuarenta y es Francisco tan amable. |
|
11.846 | Por lo tanto yo he seguido haciendo aquí un lugarejo. Antes de llegar a viejo y olvidarme a qué he venido creo que tendrá sentido que a contarlo no os gastéis. Las unidades son seis más cuatro son las decenas con otras ocho centenas y once millares, ya veis. |
Roberto (Las Palmas de Gran Canaria, España) 2006 |
12.237 | En loor de multitudes me reciben con ardor (porque es «loor» y no «olor» aunque hay similitudes). Me provocan inquietudes mostrando cierta indolencia y en el verbo su carencia el que usa así la lengua. El espacio ya me mengua para las cifras, paciencia. No pueden tener «placét». Yo defiendo el castellano y lo dice muy ufano: «Lo he leído en Internet». Parece que usa bidet para lavarse con él de donde salen, ¡qué cruel! sus ideas y pensamientos. Dejo doce mil doscientos treinta y siete. ¡Qué nivel! |
|
12.440 | Por querer abarcar mucho me he comido yo un acento y me quedó un esperpento, en mi cabeza lo escucho. En esto no estoy muy ducho y me aqueja a mí un dolor. - Dígame señor doctor, después de contar cuarenta más doce mil cuatrocientas ¿Qué es peor «plácet» u «olor»? |
|
12.835 | Me vienen los pensamientos estando bajo la ducha y en mi cabeza se escucha una voz con sentimiento y llegado ese momento de hacerlo una realidad, no resiste la humedad ningún cartón o papel para escribirle yo en él las doce mil de verdad, que vienen acompañadas de otras ochocientas más. No sé si será falaz decir que es una machada o hacer como que si nada de importancia le deviene. Otras treinta y cinco tiene mas no se cual prescindir, si de la acción de escribir o del acto de la higiene. |
Roberto (Las Palmas de Gran Canaria, España) 2006 |
13.048 | Quiero seguir en la brecha trabajando como un mulo, lo digo serio, no es bulo. Andar con mi estampa arrecha, con mi salud no maltrecha, ni sentirme nunca pocho. ¿Qué rima más que un bizcocho? No hace falta ser muy listo ni tampoco darse el pisto: trece mil cuarenta y ocho. |
|
13.250 | Yo sólo pido una cosa, lo digo con mucho aplomo: Esto irá por varios tomos de seguir así la glosa. Y espero sea generosa, por hacerme yo el mentor, que don Francisco, un señor, compartirá las cincuenta más las trece mil doscientas de los derechos de autor. |
|
XIII CDXL | Más difícil todavía será actuar como paganos y usar números romanos. Producirá algarabía si con esta estrofa mía conseguirlo yo lo intento ya que persiste irredento. Equis, I, I, I, con raya Ce, De, Equis, Ele, ¡vaya! Digo aquí, sin aspaviento. |
|
13.655 | El que acude aquí a esta brega buen sentimiento denota pues aquí elevamos cota, con denuedo y con entrega. Nadie con ofensas llega y si alguien siente herida, de todos es consabida que hay mala interpretación. Trece mil seiscientas con cincuenta y cinco añadidas. |
|
13.857 | A trece mil ochocientas cincuenta y siete yo quiero arribar con lapicero y con papel a las cuentas, con dedos por herramientas para cumplir la faena, llegando en forma serena a lograr el objetivo que de modo progresivo de letras llena esta escena. |
|
14.063 | Si se dice algo con brillo, es decir, algo brillante, en Canarias es bastante para encajar, cual bolillo, decir «¡arráyate un millo!» Millo es maíz para gallo, que veloces como un rayo tantean en juegos de mesa. Catorce mil ya son esas con sesenta y tres me «arrayo». |
|
14.265 | Aquí estoy, sí, nuevamente, ¿estorbo a quien mira esto? - No. Sólo un poco molesto (sin querer ser imprudente) que volverás reticente a Francisco Briz Hidalgo; yo te echaría los galgos por obligar con ahínco (catorce, dos, seis y cinco) a contar, que yo no valgo. |
|
14.660 | Por verlo solo cantar a esta payada yo me uno mas no encontrará ninguno que a mí me pueda igualar. Le puedo garantizar por todo tiempo que he vivido que hasta aquí yo he venido en gran forma y, de repente, permítame que me presente: «El payador perseguido». Mejores podrá encontrar mas no hay otro como yo ¡el hombre que peor payó! difícil de superar. Y le puedo asegurar (esto es lo que se comenta) después de sacar mi cuenta, en forma muy acertada que es mi punto de llegada catorce mil, seis, sesenta. |
«El payador perseguido» (ciudadano del mundo) |
15.000 | Al empezar a payar yo no conocía nada y pa' no hacer pavadas ahí empecé a estudiar. Las rimas a practicar, en décimas y octavas, la cosa no cerraba ni nada que se parezca y armé flor de gresca en mi primera payada: «Ve a llevar a "la Lulú" a lo de la tía Lola, la vaca mueve la cola, la pampa tiene el ombú, el puchero caracú, y ruedas la bicicleta, los militares jinetas, y las bolas, los billares, acá son XV millares y esto no es una cuarteta». |
|
15.600 | ¡Lo mío fue desastroso y no he mejorado mucho! En esto no estoy muy ducho ya que resulto jocoso. Me propuse algo grandioso para mi mejor rimar a mis décimas armar teniendo mucha paciencia y con grandiosa eficiencia números utilizar: «Yo creo ser muy sinCERO no andar haciendo desasTRES como hacen esos pillasTRES lo mismo que un aguaCERO. Tampoco soy bolaCERO pertenezco a los suertuDOS, no hago como esos boluDOS que comen cualquier bizcOCHO, desde aquí le digo chOCHO que le dejo mis saluDOS». ¡Malísimo está saliendo ya se dieron cuenta todos! Aunque yo de cualquier modo voy a seguir insistiendo y décimas componiendo y buscaré un profesor para que me haga un favor realmente valedero. Quince seis y doble cero aquí quedan en su honor. |