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FRASES AUTORREFERENTES
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Gran amiga catalana yo le quiero contestar y ahora yo voy a empezar sin querer decir macanas. Dijo que peinaba canas cuestión que nadie dudó sin titubear lo afirmó y aquí ha quedado plasmado escrito está en algún lado, se lo canto a viva voz. Quien el turno le cedió el Nono Lolo no ha sido sino que fue el perseguido que es igual que decir yo. Catalana usted le erró, pensó en forma equivocada aguántese esta estocada porque en forma varonil le digo usted está senil y un poco desmemoriada. Y dice que fue a traición y muy errada usted está porque por cierto sabrá las reglas de este fogón. Si ante cualquier ocasión alguien no puede escribir muy simple puede decir que por hoy mi turno cedo para que Paco, mas luego, diga quién debe seguir. Nuevamente iba a pasar pues casi nada es mi tiempo mas pensé por un momento las cosas debo aclarar. Yo le vuelvo a reiterar que las reglas así son digo con gran convicción y todos pueden dar fe ahora digo lo que sé del Nono y su ocupación. El viejo está complicado con unos «Juegos de Ingenio» poniendo todo su empeño, aunque anda medio mareado. Es que se ha dificultado por tanta resolución no les halla explicación y si pretendo ayudar dice: «me van a expulsar» y sigue con convicción. Un torneo hay que jugar que clasifica al mundial ganarlo sería genial para así poder viajar. En Brasil van a jugar personas de todo el mundo gente que en pocos segundos resuelve los acertijos, cosa difícil mis hijos, digo, de modo rotundo. De los políticos temas yo no pretendo opinar porque no quiero quedar metido en algún problema. No entiendo de ley, de lemas, de balotajes*, ni alianzas yo tengo gran desconfianza pues siempre me defraudaron, casi siempre me fallaron, terminando mi esperanza. Molestarlos yo no quiero yo no intento incomodar grescas no pretendo armar pero debo ser sincero. Por eso es que antes prefiero dialogar de cualquier tema sin demasiados problemas que sean temas divertidos, no quiero estar aburrido, al menos ese es mi lema. Yo recuerdo claramente a un caudillo de esta zona que sin que parezca broma esto dijo y de repente: «cuando yo sea intendente el cementerio veré, mucho lo iluminaré, sin querer armar entuertos, porque sé estos pobres muertos muy mal viven, yo lo sé». Fue pobre lo que escribí pero he vuelto, que no es poco, aunque no ande bien mi coco creo que por hoy cumplí. Por eso ahora dejo aquí uno y cinco por un lado juntito a un cuatro pegado, agregándole tres huevos, señores, digo hasta luego y doy un paso al costado. |
«El payador perseguido» (ciudadano del mundo) mayo 2007 
balotaje = En el sistema electoral, segunda vuelta que se realiza entre los dos candidatos más votados cuando nadie ha obtenido la mayoría requerida. |
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No sé por donde empezar esta colaboración porque si no fue traición lo que aquí tuvo lugar van a tener que explicar el motivo superior que en la ocasión anterior hizo que aporte mis ripios, comienzo por el principio que creo que es lo mejor. Si mencioné yo a las canas y nadie me corrigió entiendo que se debió a que hice centro en la diana, lo expresa esta catalana que no recurre a mentiras y donde apunta la mira acierta sin duda el tiro y no admite dar respiro despachando en vuelta y vira. «Como decíamos ayer» parece exclamar el Nono que después de su abandono él no alcanza a comprender la vergüenza que al volver deja presente su don ¡es que no tiene perdón! que es esconderse tras Paco y desde ya le destaco que no es Fray Luis de León. Usar el nombre del cura (tremenda comparación) no le doy mayor razón pues me acucia la premura y en su cabeza tan dura aunque a explicarle yo vuelva no creo que usted resuelva la duda que le he creado y pensará equivocado que hablo del rey de la selva. Se olvida en su perorata que hacia mí iba dirigida al soltarme la parida de una regla y que la acata, que no habla con mojigata y sí dama femenina, condición que me destina por la regla natural a que en un plazo mensual la soporte, cosa fina. Algo que resulta obvio, que reviste gravedad, su actual personalidad que produce un gran agobio en su condición de novio pues le ocurre a su pareja por situación tan compleja al no tener por sabido entre el Nono o perseguido quién es el que la corteja. Y peor aún se pone llegado en este momento en que aparece en el cuento (generando el descojone), pido a Dios que lo perdone y lo asista en un trienio o antes del fin del milenio a encontrar la solución, le hará falta inspiración para esos juegos de ingenio. Si política tocamos aunque sea de pasada tuvimos varias jornadas de propuestas y reclamos, especialistas del ramo (gobierno y oposición) hablan sobre la nación en duelo parlamentario y aportan de corolario: paciencia y resignación. Y si tiene el perseguido la diversión como lema le digo que a mí el sistema que tengo por preferido es que no haya compelidos por el rigor de la fuerza y dejar que el pueblo ejerza su plena soberanía desterrando tiranía que haga que el rumbo se tuerza. Y ahora caigo yo en la cuenta que los últimos guarismos incorporan en sí mismos cual caracteres de imprenta numeración nada exenta de una métrica estudiada, veamos esta tirada: ciento cincuenta y seis son ¿vale de muestra el botón? faltan tres ceros, de nada. |
Ana Bol i Zantes, (Girona, España) julio 2007  |
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No diré que a mí me indigna ir de dos mil en dos mil mas se me antoja pueril que sea esta la consigna y de la forma más digna continuaré en el sendero advirtiéndoles, primero, que convencido no estoy por eso es que ahora voy a plantear aquí mis peros. Esta ventana que, abierta a brisas de libertad, deviene arbitrariedad que cierra todas las puertas al decimista ¡despierta! ¡no dejes que te avasalle! aquel que, mira el detalle, sus cifras las redondea porque al versear compadrea, ¡pasémoslo por el dalle*! Creo que me pasé un poco en lo que antes redacté, tómenlo cual paripé y es que yo en un diplodoco sin motivo me trastoco y controlarme me cuesta, aún espero la respuesta del área de psiquiatría que indique la batería de pastillas de mi ingesta. Quitando esta tontería y los brotes esquizoides sólo un poco paranoide y unas fobias que tenía no creo que nadie diría que no soy un tío normal y eso es lo primordial sentirse uno siempre a gusto, no es cuestión de andar con sustos por una afección trivial. Lo que sí escuché decir alguna vez al galeno que siempre tengan por bueno lo que puedo sugerir, no vaya alguno a morir por llevarme la contraria pues llevo a mi solitaria atada con la cadena, generalmente es muy buena aunque a veces muy sicaria. Una vez se rebeló contra un hombre entrado en carnes y enrollada como un guarne casi se lo merendó, ¡la madre que la parió! a esta desagradecida que casi desde nacida le di cobijo en mi seno, no sé si lo vio relleno o que ya estaba aburrida. Cierto es que ha consumido de mí todo lo que pudo, si parecía un embudo tragando ya sin sentido hasta que un día dolido por su mal comportamiento le dije: «en este momento se separan nuestros entes, te llevaré solamente de mero acompañamiento». Y así transcurren los días circulando en paralelo, arrastrada por el suelo me va haciendo compañía pero es que a veces la tía del mal genio se contagia, como por arte de magia sale corriendo hacia afuera y me resulta la espera más larga que su aerofagia. Qué más les voy a contar, sigo ajeno a la blasfemia vivo junto con la tenia, compartimos nuestro hogar, para los dos hay lugar viviendo de esta manera, su casa es una manguera perfectamente adaptada, si vieran, una monada, con su balcón y escalera. Y los tengo que ir dejando porque ya pronto me llaman, uno, cinco y ocho claman junto a tres ceros andando, de volver, yo no sé cuando. ¿Me van a echar mucho en falta? Vuestro cariño me exalta. Mis opciones son diversas: una camisa de fuerza o a lo mejor tengo el alta. |
dalle = guadaña. Roberto (Las Palmas de Gran Canaria, España) julio 2007 
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¡Vaya tremendo dislate! el que por aquí acontece, es que a mí me lo parece o estoy loca de remate, rodeada estoy de orates y ahora que rebobino en mi memoria examino que toda esta relación me hizo perder la razón, es decir, perder el tino. No conozco en mi prosapia episodios similares ni en los lejanos añares desde Adán y la melapia* y no sé si de terapia me servirá hacer repaso pormenor de cada caso que precisa tratamiento, a partir de este momento va de locura el parnaso*. Un cúmulo de rarezas pulula por estos versos, quien haya hecho el esfuerzo de leer, ¡vaya entereza!, confirmará la certeza del psiquiatra en su diagnóstico aseverando el pronóstico de trastorno mismamente del que un día es fiel creyente y al otro total agnóstico. Voy a tratar de contar, de manera muy sucinta, que aprecien muy bien la pinta del principal ejemplar que un día vino a «jugar» colgando presto en la red «palabras» y mire, usted, en lo que esto derivó y lo que no entiendo yo ¿por qué le otorgan merced? Dice alguien que lo conoce que con el mantenimiento de la «web» pone su acento que le produce un gran goce y aunque diga que oye voces aún no llegó al umbral en que traspasado tal se alcanza el límite insano, este proyecto de humano se escapó de un hospital. Otro caso de remate, el Nono y el Perseguido, tiempo ha que su sentido no hay nadie que lo rescate, sueltan cualquier disparate si la ocasión se les cuadra y si uno se desmadra, siempre muy fuera de tono, o bien es el Lolo (Nono) o el Perseguido es quien ladra. La ciencia sigue estudiando este caso extraordinario en que dos estrafalarios se siguen complementando y lo curioso es que cuando hay uno que lo embadurna es el otro el que rebuzna para no meter la pata y maúlla como una gata en las veces que se turnan. La tremenda analogía por la habitual coincidencia hace que dos sean las ciencias, sin contar la uromancía*, de un lado la psiquiatría que se concentra en sus mentes y la otra referente zoología de animales, intentando saber cuáles materias son las carentes. Completa este panorama, como causa primigenia, que Roberto con su tenia nos enseñan su zalama*, falta que compartan cama rematando la faena, la verdad es una pena la situación tan confusa, y nos ponga como excusa... ¡que la tenia está muy buena! Por suerte, creo que escapo a la pandemia presente, desde la acera de enfrente veré si yo me solapo y evitar que, como un trapo, concluya mi sana vida, permitan que me despida con ciento sesenta, ya y tres ceros; la verdad... me mantendré prevenida. |
melapia = variedad de la manzana común. Ana Bol i Zantes, (Girona, España) julio 2007
uromancia o uromancía = supuesta adivinación por el examen de la orina. |
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Vaya lío el que yo tengo por la culpa de los «Juegos», de saberlo, ¡desde luego! que ganancias no devengo, prefiero que el camarlengo trate con la inquisición y me den la absolución o me manden al infierno, pues estar en el averno es mejor que esta cuestión. Una duda me corroe, no sé si contarla o no, ¡si vieran lo que pasó! no lo cura ni el aloe: recibe clases de oboe la maldita saginata* y es que no para la pata, me tiene del tingo al tango y ni haciéndome el zanguango* deja de darme la lata. Pero es asunto menor esto que yo les comento, dejaré por el momento para ocasión posterior y les cuento lo peor que pasó; la susodicha, convertida en una bicha me arrinconó y me hizo frente por las «autorreferentes». ¡Ay, si vieran mi desdicha! Les comenté el otro día que este pedazo de tenia sin precisar de la venia por ahí se me perdía, recurrí a la abogacía para iniciar una acción, pedí la separación por no terminar maltrecho mas por pareja de hecho no me dan la solución. Pero vuelvo a sus andadas: cuando ella se iba de casa yo me decía: ¿qué pasa? ¿dónde irá esta desgraciada? y resultó que aplicada la señora doña tenia acudía a una academia para aprender a leer y de ahí mi padecer parecido a una epidemia. Ya que iba a tomar clases de lectura acelerada aprovechó de pasada un curso de Internet base y no sé si de striptease, porque todo ya es posible, pero lo más increíble: por leer y navegar vino al preciso lugar de los «Juegos», ¡es terrible! Dice ella que navegó por chistes y jitanjáforas, calambur, colmos y anáforas, de pangramas algo vio pero nunca pensé yo (¡es que soy más inocente!) que a las «autorreferentes» leerlas ella podría y así está la vida mía sin saber hacerle frente. «Que quien me dio a mí permiso para airear nuestros asuntos». «Que si lo nuestro en conjunto casi era el paraíso, ¿por qué suelto de improviso las cuestiones negativas?» Poniéndome cuesta arriba continuar como pareja: «o lo de internet lo dejas o te buscas otra piba». Y aquí estoy, ando cual loco, recurro a las pitonisas y me ponen por premisa que dinero suelte un poco. Recorrí todos los zocos, llamé a todos los canales, gasté todos los reales en llamadas y en consultas y al final ahora resulta que los líos no son tales. Porque otra vez al siquiatra con mi turno tuve que ir y me viene ahora a decir que la tenia me idolatra, que le busque un buen podiatra* y, atiendan a mi relato, que me saldrá más barato solucionar el problema calmándole el eritema que le causan los zapatos. Y como piensa algún sabio ¡el efecto dos mil vive! y lo dice quien escribe no mordiéndose los labios y en acto de desagravio con la tenia, este profeta, con dos mil llega a la meta más ciento sesenta añejas y sesquicentena* deja porque sigue majareta. |
saginata = tenia saginata Roberto (Las Palmas de Gran Canaria, España) julio 2007
podiatra = podólogo |
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